
Objetivo:
En esta catequesis recordaremos que la obra de Dios tiene un terreno propicio en el seno de la familia, lo comprendemos cuando contemplamos los relatos del evangelio sobre la familia de Nazaret y también cuando consideramos el entorno familiar de San José Sanchez del Río; la actualización de esta enseñanza no ayudará a entender la importancia de cultivar el anhelo de Dios en nuestras familias sobretodo en el corazón de los niños y de los jóvenes.
1. Escuchemos con atención el siguiente canto:
2. La familia
El evangelio según San Lucas nos entrega algunos relatos que nos presentan la vida de Jesús en el seno de la familia de Nazaret. El relato del nacimiento del Señor es muy interesante, nos sitúa en la historia, nos presenta a José como un ciudadano responsable que acató la orden del censo; nos da detalles del nacimiento de Jesús y nos dice cómo vivía María todas estas cosas.
Para los creyentes, la familia de Nazaret es un modelo de familia; en las familias cimentadas en el amor de Dios las relaciones de los esposos, de los hijos con sus padres, de los hermanos y de los papás con sus hijos están impregnadas del anhelo de Dios que se manifiesta tanto en la piedad como en la la caridad con la que se tratan unos a otros. Cuando los niños crecen respirando en su familia un ambiente de fe y de amor estas virtudes florecen en sus corazones en forma extraordinaria.
Acerquémonos a la historia familiar de San Joselito. Escucha el relato:
Estas imágenes te pueden ayudar:



3. A propósito el Papa Francisco nos dice que la familia comunica la fe
…. mediante el anuncio explícito del Evangelio y el legado de múltiples formas de testimonio, entre las cuales: la solidaridad con los pobres, la apertura a la diversidad de las personas, la custodia de la creación, la solidaridad moral y material hacia las otras familias, sobre todo hacia las más necesitadas, el compromiso con la promoción del bien común, incluso mediante la transformación de las estructuras sociales injustas, a partir del territorio en el cual la familia vive, practicando las obras de misericordia corporal y espiritual»
Esto debe situarse en el marco de la convicción más preciosa de los cristianos: el amor del Padre que nos sostiene y nos promueve, manifestado en la entrega total de Jesucristo, vivo entre nosotros, que nos hace capaces de afrontar juntos todas las tormentas y todas las etapas de la vida… Todos deberíamos ser capaces de decir, a partir de lo vivido en nuestras familias: «Hemos conocido el amor que Dios nos tiene» (1 Jn 4,16).
4. ¿Qué significa esto para nuestra vida?
Comparte con tu familia, con tus compañeros o con tus amigos que significa el mensaje que has recibido en esta catequesis. Te pueden ayudar las siguientes preguntas o sugerencias:
- ¿Que deja en tu corazón lectura del relato del nacimiento de Jesús y escuchar el relato que habla de la familia de San Joselito?
- Jesús aprendió muchas cosas buenas de José y de María, sobre todo a cumplir la voluntad de Dios. También Joselito aprendió de sus papás muchas cosas, entre ellas una fe inquebrantable. ¿Qué cosas buenas has aprendido de tus padres?
- No hay familia perfecta y nadie debe desanimarse por los errores o defectos de alguien de su familia; el papa Francisco nos recuerda que «cuando nos equivocamos, Dios corrige la historia y nos lleva adelante, adelante, siempre caminando con nosotros». Custodia en tu corazón las situaciones difíciles de tu familia y en la oración preséntalas a Dios pidiéndole que se manifieste en ellas.
- Hoy vamos a aprender una hermosa oración en forma de himno que recién ha compuesto un joven sacerdote salesiano, originario de Zamora y que es un gran devoto de San José Sanchez del Río.
Muy bonita novena, estamos comprometidos de darla a conocer para que más gente conozca a nuestro Santo Michoacano José Sánchez Del Río.
El nos concedió un milagro al mejorar la salud de mi hija ‘Miriam Melania Marroquín Campos .
Agradezco profundamente su intersesión!